La actual situación mundial producto de una enfermedad derivada de un virus invisible, ha provocado variedad de cambios en todos los aspectos cotidianos, uno de estos cambios, está ligado a la difusión de grandes cantidades de información que es divulgada y transferida sin ningún tipo de control por diferentes medios comunicacionales en línea.
La escuela no es extraña a esta corriente, sin lugar a dudas la era digital se ha posesionado entrando con fuerza y ha obligado a ver de diferente manera lo ya establecido. En este reciente paradigma educativo que inyecta modelos de enseñanza-aprendizaje digitales, es de importancia prioritaria dotar a la comunidad educativa de las competencias necesarias para enfrentar los desafíos que impulsa la tecnología.
En este contexto de cambio y transformación de viejos paradigmas, la biblioteca escolar renovada y comprometida retorna con un papel determinante, encontrando una oportunidad para seguir manteniendo informada a la comunidad educativa a través de recursos y estrategias que permitan a quienes buscan información; ser hábiles, capacitados y preparados para expandir sus competencias que le faculten entenderla, interpretarla y crear conocimiento.
Sin embargo y a pesar de la implicación que tiene una biblioteca en el proceso de aprendizaje, en algunas Instituciones educativas no han visto necesario la presencia de un bibliotecario en esta situación de aislamiento, tal vez por la falta de interés en brindar una educación donde la indagación sea fuente de conocimiento o simplemente por proteger sus interese económicos, ventajosamente hay Instituciones que se apuntalan como visionarias y acopladas a este nuevo paradigma, buscando a toda costa, salvaguardar los intereses de los estudiantes de esta generación, conocidos como “nativos digitales”.
La Unidad educativa Jesss es una de las Instituciones comprometidas con la educación de calidad y en esta época de crisis ha capacitado a todos sus colaboradores. De la misma manera ha brindado el apoyo y soporte a la biblioteca institucional, dando la debida importancia y reconocimiento que tiene la alfabetización mediática y la indagación como fuente de conocimiento guiado y autónomo en sus estudiantes.
En conclusión, Las bibliotecas escolares inmersas en el proceso de enseñanza aprendizaje, han encontrado la oportunidad ideal para impulsar toda su capacidad en la gestión de información y el conocimiento que se difunde, dando horizonte a la alfabetización informacional de los alumnos y docentes, además de gestionar y difundir recursos a través de varios medios, uno de ellos ha sido el diseño y creación de bibliotecas hibridas donde se agencian recursos físicos y virtuales.
Lcda. Sandra Arellano.
Coordinadora Biblioteca Jesss.